La tolerancia es el valor que normaliza las relaciones humanas de los individuos en la familia, el vecindario o la escuela.
Ser tolerantes nos permite aceptar a los otros con sus virtudes y defectos, aunque esas virtudes y esos defectos nos desagraden en un momento determinado.
Sin una percepción clara de lo que significa la tolerancia se hace imposible la convivencia escolar, ya que cuando ésta no está claramente definida el individuo (el alumno en nuestro caso) comienza a transgredir las normas preestablecidas y el derecho individual de los demás. Se convierte entonces en un antivalor (intolerancia) generador de guerras y de la violencia desbordada en el mundo.
La tolerancia, al igual que todos los valores y sus contra valores, se aprenden en el seno familiar de cada individuo a través de los modelos de vínculo afectivo que crean sus familiares entre sí y con sus vecinos en general.
Un niño o niña que proviene de un hogar estable donde sus miembros se respetan y tratan con afecto y cariño, reproducirá esa conducta en la escuela. Si por el contrario ese individuo proviene de una familia inestable y desarticulada, seguramente será un factor de desestabilización en el colegio.
Se hace entonces necesario evaluar los niveles de tolerancia de cada individuo para diseñar acciones preventivas que permitan acrecentar el valor tolerancia con el apoyo de la escuela y de la familia.
Ser tolerantes nos permite aceptar a los otros con sus virtudes y defectos, aunque esas virtudes y esos defectos nos desagraden en un momento determinado.
Sin una percepción clara de lo que significa la tolerancia se hace imposible la convivencia escolar, ya que cuando ésta no está claramente definida el individuo (el alumno en nuestro caso) comienza a transgredir las normas preestablecidas y el derecho individual de los demás. Se convierte entonces en un antivalor (intolerancia) generador de guerras y de la violencia desbordada en el mundo.
La tolerancia, al igual que todos los valores y sus contra valores, se aprenden en el seno familiar de cada individuo a través de los modelos de vínculo afectivo que crean sus familiares entre sí y con sus vecinos en general.
Un niño o niña que proviene de un hogar estable donde sus miembros se respetan y tratan con afecto y cariño, reproducirá esa conducta en la escuela. Si por el contrario ese individuo proviene de una familia inestable y desarticulada, seguramente será un factor de desestabilización en el colegio.
Se hace entonces necesario evaluar los niveles de tolerancia de cada individuo para diseñar acciones preventivas que permitan acrecentar el valor tolerancia con el apoyo de la escuela y de la familia.
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